Si su perro está temblando, puede haber muchas razones diferentes. En muchos casos, las causas son completamente inofensivas. Sin embargo, puede ser que los temblores de su perro sean un signo de un problema de salud grave y que su amigo de cuatro patas necesite atención médica urgente.
Por lo tanto, es importante que sepa cómo reconocer si su perro está temblando por una razón segura o si el temblor es motivo de preocupación. A continuación, le explicaremos cómo puede hacer esto.
Hay una serie de razones inofensivas que pueden hacer que su perro tiemble. Por ejemplo, algunas razas de perros tienden naturalmente a compensar su tensión interna a través de los temblores. Este comportamiento se puede observar con mucha frecuencia, especialmente en perros de caza como los terriers.
Dicho esto, el temblor puede ser simplemente una señal de que su perro tiene frío. Además de las razas sin capa inferior, los animales con un porcentaje muy bajo de grasa corporal, como los galgos, son particularmente sensibles al frío.
Los perros ansiosos también pueden temblar, aunque el miedo generalmente se manifiesta en otros comportamientos como gruñir, crujir de dientes y orejas aplicadas.
Si su perro está temblando debido al estrés excesivo, puede tener sentido calmarlo con un suplemento dietético adecuado.
Para este propósito, le recomendamos que use Shiimun Calm con Shiitake. La preparación natural contiene ingredientes cuidadosamente coordinados que apoyan a su amigo de cuatro patas de una manera saludable para relajarse y así contrarrestar el temblor de su perro.
Si puede y debe hacer algo sobre los temblores de su perro depende de la causa exacta. Básicamente, debe tener cuidado de no exponer a su amigo de cuatro patas a un estrés excesivo y evitar situaciones de miedo si es posible.
Para algunas razas, usar ropa adecuada para perros puede tener sentido contra los temblores fríos en invierno. Si, por otro lado, su perro tiembla ocasionalmente durante el sueño o por alegría, no tiene que preocuparse y no hacer nada más.
Desafortunadamente, los temblores no siempre son inofensivos en los perros. En algunos casos, también puede ser el síntoma de una enfermedad que necesita tratamiento urgente por parte de un veterinario. Esto es especialmente cierto si su perro no solo está temblando, sino que hay otras quejas.
Si un perro tiene la enfermedad de Addison, sus glándulas suprarrenales ya no pueden producir hormonas importantes. Los perros afectados tiemblan y también sufren síntomas como diarrea, fatiga, pérdida de apetito y debilidad muscular. Los síntomas generalmente se tratan mediante la administración de hormonas sintéticas.
Si su perro experimenta un giro estomacal, su estómago gira alrededor de su propio eje. La emergencia que pone en peligro la vida causa, entre otras cosas, que su perro tiemble. Sin una cirugía de emergencia inmediata, la rotación del estómago provocará la muerte en unas pocas horas.
Si los riñones de su perro ya no funcionan correctamente, esto se llama insuficiencia renal. Además de los temblores, los síntomas de insuficiencia renal en los perros incluyen falta de apetito y fatiga. Los animales afectados generalmente requieren un tratamiento de por vida, siendo especialmente importante una dieta especial para los riñones.
Al igual que los humanos, los perros pueden desarrollar epilepsia. Además de los temblores, el trastorno nervioso crónico en los amigos de cuatro patas afectados se nota principalmente por las convulsiones típicas, que pueden ocurrir más o menos regularmente en diferentes formas.
El Síndrome de White Dog Shaker es un trastorno hereditario que solo afecta a los perros blancos. Los síntomas de la enfermedad incluyen temblores, desorientación y movimientos oculares sorprendentemente rápidos. El tratamiento se lleva a cabo con medicamentos, aunque en algunos casos también debe administrarse de forma permanente.
El moquillo es una enfermedad viral muy peligrosa que puede causar daño permanente a los perros infectados o incluso puede ser fatal. Un perro que sufre de moquillo no solo tiembla, sino que también sufre de dificultad para respirar, diarrea, fiebre y parálisis. Se recomienda proteger a los perros del moquillo temprano con la vacunación.
Además de las razones mencionadas, el envenenamiento es otra causa peligrosa que puede hacer que su perro tiemble. Por ejemplo, la intoxicación puede ser causada por comer un cebo venenoso. Sin embargo, también puede resultar del consumo de plantas venenosas o alimentos nocivos para los perros, como el chocolate.
Si su perro ha sufrido una intoxicación aguda, esto se nota además de temblores, entre otras cosas, por salivación excesiva, calambres, apatía, vómitos, diarrea, latidos cardíacos rápidos y falta de aliento.
Dependiendo del tipo de veneno, la administración rápida de tabletas de carbón como medida de primeros auxilios puede ser útil. No obstante, el envenenamiento es siempre una emergencia que debe ser tratada por un veterinario. No lo dudes y lleva a tu amigo de cuatro patas a un veterinario de inmediato, para que puedan evitar que ocurran cosas peores.